SUPERVIVENCIA ENTRE REJAS

"Un Profeta" es un vigoroso e intenso drama carcelario dirigido con mano firme por el francés Jacques Audiard ("De latir mi corazón se ha parado", "Un héroe muy discreto") y con un espléndido y desconocido Tahar Rahim como protagonista, que ha supuesto una estupenda sorpresa avalada de excelentes críticas a su paso por todos los festivales de cine más importantes y que ya llamó la atención en el pasado Festival de San Sebastián donde supuso uno de los momentos álgidos de Zabaltegui, muy por encima de la mayoría de films de la Sección Oficial.

Condenado a seis años de prisión, Malik El Djebena (Tahar Rahim) no sabe leer ni escribir. Cuando llega a la cárcel completamente solo, parece más joven y frágil que los demás presos. Tiene 19 años. Arrinconado por el cabecilla de la banda de corsos que domina la prisión, le encomiendan una serie de “misiones” que debe cumplir para hacerse más fuerte y ganarse la confianza del líder. Pero Malik es valiente y aprende rápido, e incluso se atreve a hacer sus propios planes.

La película es arriesgada por su larga duración y enrevesado argumento, pero a la postre nos atrapa desde el primer minuto y no nos suleta durante las dos horas y media que dura a base de buen cine en una de las mejores películas carcelarias de las últimas décadas. Ya hay voces que la compara con "El Padrino" de Coppola o el cine de tramas mafiosas de Scorsese y otras grandes obras, lo cierto es que es un film francés con actores desconocidos pero todos brillantes, en especial el protagonista Rahim que soporta bajo sus hombros practicamente todos los planos con una entereza espectacular y Niels Arestrup en el papel de Jefe Corso, y que cuenta con una brillante y ejemplar dirección de Audiard que sabe imprimir un ritmo frenético y asfixiante muy alejado al tipo de cine que suele llegarnos del país vecino y que no tiene nada que envidiar a los referentes carcelarios que nos vengan a la memoria.

Es cierto que podría haberse ahorrado unos minutos de metraje y que la historia pese a sus complicados recovecos no deja de ser una historia ya conocida y que puede recordar en algunos momentos a otros films, pero sin duda se trata de un film contundente, bello, violento, oscuro, creíble y casi redondo que hará las delicias de los amantes de los dramas carcelarios despojados de edulcorantes y aditivos comerciales.

U.C. (Daniel Farriol)